Marie Curie, que hizo importantes descubrimientos en el campo de la radiactividad, fue la primera mujer en ser distinguida con el premio Nobel y una de las pocas personalidades en recibir dos veces el prestigioso galardón instituido por el inventor de la dinamita, Alfred Nobel.
Sus trabajos sobre la radiactividad ampliaron los conocimientos de la física nuclear y descubrió dos nuevos elementos químicos, el radio y el polonio, lo que abrió la puerta a una nueva era de la medicina con grandes avances en el tratamiento del cáncer.
En 1903 la científica recibió el premio Nobel de Física junto con su marido Pierre Curie y Henri Becquerel y en 1911 le dieron el Premio Nobel de Química.